domingo, 4 de marzo de 2012

Boram.

Iba paseando por la plata y como cualquier otra persona se me ocurrió arrojar una piedra al agua con tan mala suerte que golpeé a alguién en la cabeza.
Me acerqué, introduciéndome en el agua, hacia aquella persona.
En un principio no lo noté pero luego me di cuenta de que lo había matado, ¿pero cómo? La piedra no era muy grande y no la tiré muy fuerte. Cosas del destino, pensé.
Como pude la saquñe del agua y la arrastré hasta mi coche, como era muy temprano no había nadie en la calle por lo que tuve suerte, la metí en los asiento traseros del coche y cuando me disponía a meterme en el asiento del conductor una voz dijo a mis espaldas:
-Te he visto, he visto como la has matado.
-Pero, si fue sin querer y además tú, ¿quién eres? - pregunté entre extrañado y asustado.
-Yo me llamo Boram, pero eso es lo de menos, lo importante es que eres un asesino - dijo ella con una sonrisa en la boca.
-Va.. - dije mientras me montaba en el coche.
Arranqué el coche y cuando eché marcha atrás para poder salir del aparcamiento Boram se había metido en mi coche.
-Pero que..
-Sh.. Conduce hasta esta dirección - me dijo.
Me entregó una tarjeta con la dirección y conduje has ta ella.
Llegamos a una casa a las afueras de la cuidad.
Bajamos del coche y ella me indicó que le ayudara a bajar el cadáver del coche para esconderlo dentro de la casa.
Tras haberlo metido en una de las habitaciones me dijo que nos íbamos de allí hacía la ciudad otra vez.
-Bueno, y a qué viene tanta amabilidad - le dije.
-Pues mira, tú necesitabas ayuda con eso y yo necesito ayuda con otra cosa así que yo te ayudo y tu me ayudas - me dijo sonriéndome.
-Pero..
-No hay peros, me ayudas y punto - dijo un tanto seria.
Me entregó una carpeta con un dossier dentro, abrí la carpeta y me leí el dossier por encima. Cuando volví la cabeza hacía el asiento del co-piloto ya no estaba, en su lugar había una nota que decía:
''Hay tienes la historia de una persona, mátala, ya eres experto en eso ¿no? y otra cosa: que parezca un accidente.''
Estas últimas palabras estaban escritas en mayúscula.
Por supuesto, no pensaba matar a nadie.
Me fui hasta mi casa, al llegar había una nota en la puerta.
''Si no lo haces serás tú el que muera.''
Casi me atraganto al leer aquello.
Bueno, era la persona del dossier o yo, así que mañana me pondría manos a la obra.
Según leí la persona que debía morir se llamaba Tiffany y tenía como costumbre ir ha correr todas las mañana así que iría detrás de ella, le daría un pequeño empujón haciendo que al resbalarse se golpeara la cabeza, provocando así su muerte inmediata.
Así lo hice, aquella tarde después de asesinar a otra persona tocaron a mi puerta y deslizaron otra carpeta por debajo de ella.
''Ahora, serás mi asesino personal, no puedes echarte para atrás. Tengo fotos tuyas que te delatan en os dos asesinatos.'' rezaba una nota que tenía pegada la carpeta.
Creo que desde ese día hasta hoy he matado a una persona por semana y le he pillado el gustillo a esto de matar. Vamos que ahora es algo normal en mi vida, pues me he acostumbrado a esperar a que toquen a la puerta para recoger la carpeta y que a la mañana siguiente me levantara temprano para matar.
Pero hay una cosa curiosa, las víctimas siempre son mujeres jóvenes con el pelo negro y los ojos verdes.
Mucha gente se preguntará que por qué no lo he dejado y es por el echo de que Boram siempre me fotografía matando a alguien y temo que si me niego me entregue a la policía.
Si, me llamo Henry y soy un asesino en serie, ¿y que?.

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